Después de dar una vuelta por el mercadillo comenzó la ginkana-rally.
¡Estuvo muy divertida!
Nosotros no participamos, ya que papi pensaba que el terreno estaría muy mal y entonces él rompería el coche.
Finalmente no era tan complicado, unos corrían más, otros menos, y el acompañante con la lanza tenía que golpear unos bidones, coger unas anillas y finalmete debían pasar el coche con 2 ruedas por encima de un tronco.
A TOPE- ATOPEEE!!!!!!
ResponderEliminar